La matanza a gran escala de aves sólo por tener el “sexo equivocado” sigue siendo una práctica industrial tabú y encubierta.
El procedimiento de triturado y gaseado de pollos y patos está permitido por la legislación vigente en la UE, pero podría prohibirse como parte de la revisión de la legislación comunitaria sobre “bienestar animal”, prevista para 2023-2025.
En una carta abierta al Consejo de la UE, enviada a comienzos de mes, 18 ONG defensoras de los animales piden a los ministros de Agricultura de la UE que aprueben la prohibición del gaseado y la trituración sistemática de los pollitos machos y los patitos hembra. Desde un sitio web ad-hoc, los habitantes de la UE pueden ponerse en contacto con su ministro de Agricultura con mensajes escritos preparados. Para el caso de España, este es el mensaje.
Un pollito macho es triturado o gaseado por cada gallina criada para la producción de huevos. Los pollitos macho se consideran ” inútiles ” para la industria del huevo porque no ponen huevos y no tienen ninguna utilidad económica en el mercado de la carne. Por ello, cada año se sacrifican 330 millones de pollitos macho de un día de vida. Los empleados separan a los pollitos machos en cuanto salen del cascarón, y mientras los pollitos hembra se llevan a las granjas para poner huevos, los machos son sacrificados. Decenas de millones de patos hembra corren la misma suerte, ya que el hígado de las hembras es menos valioso para la producción de foie gras, por lo que las empresas del rubro crían y alimentan exclusivamente patos macho.
Tras la publicación de fotografías que mostraban la matanza sistemática de polluelos en 2015, el gobierno francés se comprometió a apoyar el desarrollo de tecnologías de sexado in-ovo, que permiten determinar el sexo de los polluelos antes de que nazcan. El gobierno francés anunció la prohibición de la matanza de polluelos de un día en 2020. Del mismo modo, el gobierno alemán se ha comprometido a prohibir esta práctica.
En Francia, los criaderos tienen hasta finales de 2022 para pasar a adoptar dispositivos de sexado in-ovo y dejar de matar a los pollitos macho de forma sistemática. Las plantas de incubación han recibido 10 millones de euros de ayuda estatal para asistir en la transición a tecnologías alternativas con el fin de garantizar que los productores cumplan la legislación. Se espera que esta nueva técnica aumente el precio de venta de los huevos en sólo un céntimo por huevo.
Hay múltiples razones por las que es posible prohibir el sacrificio sistemático de los pollitos macho: existe un fuerte apoyo comunitario a la prohibición, existen alternativas al sacrificio sistemático de los pollitos macho y dos naciones han prohibido previamente esta práctica. Por último, pero no por ello menos importante, la revisión de la legislación de la UE sobre el “bienestar de los animales de granja” representa una oportunidad única para prohibir esta práctica en toda la UE.
Una modificación a la legislación comunitaria sobre la materia es fundamental. La Comisión Europea, encargada de proponer una nueva ley en 2023, está estudiando la posibilidad de prohibir la matanza sistemática de pollos en la UE. La Comisaria de Salud y Seguridad Alimentaria, Stella Kyriakides, declaró que “la muerte de un gran número de pollitos de un día es, obviamente, una preocupación ética”.
Tal observación se ve corroborada sustancialmente por los resultados de la consulta pública de la Comisión Europea sobre el tema, que reveló que más del 94% de los más de 60.000 encuestados apoyaban la prohibición de esta práctica. Además, estas cifras son coherentes con la opinión pública, ya que sólo entre el 9 y el 18 por ciento de las personas aprueban el aplastamiento y el gaseado de polluelos y patitos.
Aunque corresponde a la Comisión Europea proponer nuevas leyes para regular mejor las prácticas de cría de animales; la decisión sobre la reforma y su eventual aplicación serán decididas por el Consejo de la UE. Para garantizar la aplicación de esta reforma, cada uno de los ministros de agricultura de los 27 Estados miembros debe apoyarla.
Por ello, 18 organizaciones de defensa de los animales han pedido a cada uno de los ministros de agricultura de los Estados miembros que respalden los esfuerzos de Francia y Alemania. Las organizaciones piden específicamente a los ministros que amplíen la restricción de la matanza de polluelos machos a toda la UE, así como que se aseguren de que la nueva ley prohíbe también la muerte de las hembras de pato, que hasta ahora han sido injustamente excluidas de estas reformas.