Según un informe del Instituto para el Bienestar Animal, la “despoblación” de animales de granja es una práctica controvertida y a menudo inhumana que ha sido objeto de escrutinio. A diferencia de la eutanasia, cuyo objetivo es proporcionar una “buena muerte”, los métodos de despoblación suelen causar un sufrimiento extremo y prolongado. La práctica suele utilizarse durante brotes de enfermedades, pero también se ha recurrido a ella debido a interrupciones de la cadena de suministro, como se vio durante la pandemia de COVID-19. Especialmente alarmante es el uso de un método conocido como Ventilation Shutdown Plus (VSD+), que provoca muertes por insolación que pueden durar horas agonizantes.
Estas son las principales conclusiones del informe
Sacrificio no “humanitario”: Uno de los métodos más controvertidos es el Ventilation Shutdown Plus (VSD+), descrito por causar un sufrimiento prolongado y extremo a los animales. Este método no está reconocido como aceptable por organizaciones internacionales de sanidad animal como la Organización Mundial de Sanidad Animal.
La Liga Humana describe el procedimiento Ventilation Shutdown Plus (VSD+) de la siguiente manera: “El calor sube rápidamente en un cobertizo sin ventanas ni aire. Sin ventilación corriente, no hay alivio para las crecientes temperaturas, especialmente cuando aire caliente y húmedo es bombeado desde el exterior. Para los pollos atrapados dentro, cada vez es más difícil respirar. Finalmente, tras soportar horas de sufrimiento, las aves se asfixian y mueren en agonía. Este escenario es real, y los resultados son intencionados. El Ventilation Shutdown Plus (VSD+) es un método brutal de dar muerte a toda una bandada -o rebaño- de animales de una sola vez”.
Métodos alternativos: El informe señala que “existen alternativas más humanas, como el gaseado con dióxido de carbono y con gases inertes, pero no se utilizan de forma generalizada, lo que sugiere que se prioriza el coste o la comodidad sobre la ética”. En esta página podrá informarse sobre el método del gaseado con CO2.
Consideraciones económicas por encima de las éticas: El USDA y otras agencias reguladoras suelen dar prioridad a los intereses económicos sobre el bienestar animal. La práctica habitual del “sacrificio sanitario” implica el sacrificio de millones de animales no infectados para evitar la propagación de la enfermedad.
Cuestiones relacionadas con la cadena de suministro y la conveniencia: En la pandemia de COVID-19 se produjo el sacrificio masivo de animales sanos debido a alteraciones provocadas por el hombre en la cadena de suministro. Los métodos elegidos para la despoblación fueron a menudo más expeditivos que humanos.
Apoyo institucional: La Asociación Americana de Medicina Veterinaria (AVMA) y el USDA han avalado oficialmente métodos como el VSD+ a pesar de las importantes preocupaciones éticas y de bienestar, lo que plantea dudas sobre la responsabilidad institucional.
Falta de transparencia: El uso de métodos de despoblación controvertidos a menudo sólo se hace público a través de solicitudes de la Ley de Libertad de Información, lo que demuestra una preocupante falta de transparencia.
Necesidad cuestionable: Muchos de los animales sometidos a despoblación no están enfermos ni suponen una amenaza inmediata, lo que plantea dudas sobre la necesidad de medidas tan extremas.
Qué pensamos en Sociedad Vegana
Un estilo de vida vegano contribuye directamente a reducir el sufrimiento de los animales de varias formas, sobre todo al disminuir la demanda de productos de origen animal. Al hacerse vegano, usted no sólo se niega a apoyar el trato inhumano de los animales – como los métodos de sacrificio descritos en el artículo del Animal Welfare Institute – sino que también promueve activamente alternativas más éticas, sostenibles y humanas. Si más personas adoptaran un estilo de vida vegano, la escala de la agricultura animal disminuiría, reduciendo los incidentes de sacrificios masivos y las malas condiciones de vida de los animales de granja.
Aunque la dimensión ética es razón más que suficiente para adoptar un estilo de vida vegano, también es dable considerar la salud humana. Una dieta vegana bien planificada puede ser extremadamente beneficiosa. Numerosos estudios sugieren que una dieta basada en plantas se asocia a un menor riesgo de enfermedades cardiacas, hipertensión, diabetes de tipo 2 y ciertos tipos de cáncer. Las dietas basadas en plantas suelen ser ricas en fibra, vitaminas y fitonutrientes, y tienden a ser más bajas en calorías y grasas saturadas. La Asociación Dietética Americana y la Asociación Dietética Británica han declarado que “las dietas vegetarianas adecuadamente planificadas, incluidas las veganas, son adecuadas para todas las etapas de la vida y para los deportistas”.
Por ello, un estilo de vida vegano sirve a un doble propósito: es tanto una elección ética que reduce el sufrimiento de los animales como una elección consciente de la salud que puede conducir a un mayor bienestar. La convergencia de los beneficios éticos y para la salud constituye un argumento convincente para considerar la transición a un estilo de vida vegano y contribuir a un mundo más compasivo y saludable.
Héctor Pizarro, Sociedad Vegana