El ministro británico de Medio Ambiente, George Eustice, declaró: “Somos una nación amante de los animales y fuimos el primer país del mundo en aprobar leyes de bienestar animal. Como nación independiente, ahora podemos ir más lejos que nunca para aprovechar nuestro excelente historial”.
El Reino Unido ha anunciado que prohibirá la exportación de animales vivos para su sacrificio y engorde, con el fin de reforzar su posición como campeón mundial de los derechos de los animales. En tal sentido, el anuncio contrasta fuertemente con la incompetencia, indiferencia y ofuscación oficial mostrada recientemente por el gobierno español en el caso de la odisea de las reses transportadas en los barcos Elbeik y Karim Allah.
El anuncio se hizo durante el 67º discurso parlamentario anual de la Reina Isabel, en el que la monarca destacó una serie de nuevas políticas de bienestar animal. Confirmó que se presentarán leyes para “garantizar que el Reino Unido tiene, y promueve, los más altos estándares de bienestar animal”.
Según medios británicos, hay tres proyectos de ley que contemplan una serie de medidas que serán implementadas a lo largo del próximo año y que incluyen el Animal Welfare Bill (proyecto de ley sobre bienestar animal), el Animals Abroad Bill (proyecto de ley sobre sobre exportación de animales) y el Kept Primates Bill (proyecto de ley sobre animales cautivos).
El proyecto de ley sobre bienestar animal -una nueva ley que reconoce que los animales son seres sintientes -es decir, que experimentan emociones como el placer, el dolor y el miedo- recibió la aprobación formal de la Reina, lo que la convierte en la primera medida importante de seguridad animal en el Reino Unido desde la Ley de Bienestar Animal de 2006.
Se espera que el proyecto de ley entre en vigor en junio de 2021. En virtud de la misma, el gobierno, además de poner fin a las exportaciones de animales vivos, se comprometerá a reconocer la sintiencia de los animales a partir del Brexit y aumentará la pena máxima por crueldad hacia los animales a cinco años de cárcel, junto con multas ilimitadas para los infractores. También se comprometerá a tomar “nuevas medidas” para limitar el comercio de foie gras.
El plan de bienestar animal también incluye medidas para proteger a los animales salvajes imponiendo la prohibición de la importación de trofeos de caza, así como la prohibición de la publicidad de los viajes para cazarlos en virtud del proyecto de ley Animals Abroad.
Además, el proyecto de ley sobre primates cautivos busca incorporar cláusulas que impidan a la gente tener primates como animales de compañía, junto con combatir el robo de animales, el contrabando de cachorros y la caza ilegal de liebres.
La nueva legislación también pretende incluir la colocación obligatoria de microchips a los gatos, restringir el uso de trampas de pegamento para roedores y financiar proyectos de conservación de la fauna salvaje en el país y en el extranjero.
Según el gobierno, los planes contemplados en los tres proyectos de ley aportarán “una mayor protección de los animales salvajes al poner fin a las prácticas de maltrato”. También se asegurará de que se disponga de “poderes efectivos para hacer frente a los problemas de bienestar de los animales de granja, junto con poner de relieve la importancia que los animales de compañía tienen en la vida de las personas, sancionando así severamente el robo de los mismos.
Nación de amantes de los animales
El ministro británico de Medio Ambiente, George Eustice, declaró: “Somos una nación de amantes de los animales y fuimos el primer país del mundo en aprobar leyes de bienestar animal. Como nación independiente, ahora podemos ir más lejos que nunca para aprovechar nuestro excelente historial”.
Las organizaciones de defensa de los animales celebraron estos avances en el plan de acción. El director ejecutivo de la Real Sociedad para la Prevención de la Crueldad contra los Animales (RSPCA), Chris Sherwood, dijo: “No podemos seguir ignorando el vínculo inextricable que existe entre el modo en que tratamos a los animales, nuestra propia salud y la del planeta, pero para lograr un cambio real, será necesario el valor de todo el gobierno. Instamos al gobierno a que sitúe el bienestar animal en el centro de la elaboración de políticas y a que estos anuncios sean sólo el comienzo de una estrategia integral y en constante evolución, sobre la salud y bienestar animal”.